¿Qué son los terrores nocturnos?

¿Qué causa los terrores nocturnos y cómo actuar para ayudar a tus hijos a lidiar con esta etapa?

Primero debes conocer la diferencia entre una pesadilla y un terror nocturno. La primera es este sueño que nos despierta, que a veces hasta parece realidad y genera ansiedad interrumpiendo el descanso, estos episodios suceden hacia la segunda mitad de la noche y con poca frecuencia, a veces tiene que ver con el estrés al que esté sometido el niño, los estímulos que recibe durante el día, por esto recomendamos cuidar lo que ven, lo que oyen y enseñarles a sustituir estos “sueños feos” por “pensamientos bonitos”. Por otro lado, el terror nocturno es una reacción repentina de miedo que sucede en la transición de una fase del sueño a otra, en un ciclo de sueño. No es para alarmarse, no hay ningún daño psicológico, sólo una llamada a darle más y mejor descanso.

Las causas

• Niños extremadamente cansados, con agotamiento acumulado o con horarios demasiado flexibles.
• Poco sueño durante el día o demasiadas horas despiertos.
• Pasando alguna enfermedad, una meta de desarrollo o por un medicamento nuevo.
• Dormir en un entorno nuevo o lejos de casa.
• Apnea del sueño

¿Cómo reconocerlo?

-Sucede durante las tres primeras horas de que el niño concilió el sueño.
-Tiene una duración de entre 5 y 15 minutos.
-El niño puede gritar, llorar, sudar, estar agitado, inconsolable, tener abiertos los ojos y parece no reconocer a sus padres, hasta podrían rechazarlos (no olvidemos que están dormidos).

Si tu hijo…

– En dos o mas ocasiones se ha levantado del sueño con un grito de pánico, mucha ansiedad, movimientos bruscos y con mucha activación.
– Lo has intentado tranquilizar durante el episodio y parece que no te reconoce y está desorientado.
– No recuerda por la mañana lo que le pasó o recuerda muy poco.
Es muy probable que presente terrores nocturnos.

Si tu hijo tiene dificultades para quedarse dormido y…

– Toma refrescos o come chocolate
– Hace ejercicio poco tiempo antes de acostarse
– Ve la televisión, computadora, tableta o celular antes de dormir
– No tiene un horario fijo para acostarse y levantarse
– Tiene más de 6 años y hace siestas prolongadas durante el día
– Ve programas con contenidos violentos antes de dormir
– Duerme en un lugar en donde hay mucho ruido
Puede tener un problema de higiene de sueño.